miércoles, 1 de septiembre de 2010

RESCATE DE LA PATRIA...

Todo ha ido derrumbándose alrededor nuestro en estos años (instituciones, convicciones, la república tal como la conocimos), pero el último derrumbe nos trajo una sorpresa inesperada, impensada...
La tierra habló el 27 de febrero. Ahora es el hombre el que habla desde el fondo de la tierra. Y habla desde el desierto, el desierto que empezaba a crecer en nuestra propia alma. La mirada de esos mineros a la cámara-sonda y la luz de sus linternas tienen el efecto de un relámpago. Un relámpago en la noche. Porque hemos estado sumergidos en una noche sin darnos cuenta. La noche de un país que ha renegado de su luz propia para copiar y encandilarse con la luz de los reflectores, las cámaras, la farándula, el evento, el reality , etcétera.
Ante estos 33 hombres sumergidos en la tierra, todo reality , todo "evento" palidece y se desintegra ante un "acontecimiento". La realidad -con su consistencia de piedra y mineral- desaloja el simulacro.
Es la verdad, la verdad de nuestra radical precariedad y abismo la que ahora brilla, y brilla sumergida, como un mineral de alta ley, puro, tenaz y deslumbrante.
La luz de estos mineros nos ciega como la luz de la caverna del filósofo griego. Como si no pudiéramos verla de frente, tanta es su potencia enceguecedora. Ahora estamos ciegos. Ciegos por la luz de 33 pequeñas linternas. Y debemos seguir ciegos todo lo que sea necesario, para volver a ver.
¿Y qué vamos a ver? Nuestra desnuda esencia, nuestra verdad más honda, nuestra belleza, nuestra esperanza tanto tiempo sepultada por la mentira.
Estos 33 chilenos son los héroes de una hazaña épica interior. Porque ésa es la batalla que hay que librar ahora: hacia adentro. Y hay que "resistir". Resistir en el sentido radical que una vez señaló el poeta Rilke. Resistir a los cantos de sirena de superficie, resistir a todo lo que nos aleje de nuestro propio centro, y nos extravíe. Porque de tanto alejarnos de nuestro centro, habíamos perdido contacto con la torre de control. Pero alguien nos ha llamado desde la pura piedra. No un e-mail, no un mensaje de texto: 33 caracteres escritos con la propia sangre.
Los mineros no están en un Infierno: somos nosotros los que estamos en él. El Infierno del sinsentido, de la falta de verdad y autenticidad. Ellos son nuestros Orfeos. Orfeo sacó a su amada Eurídice del Hades, el país subterráneo de la muerte. Ellos, con sus mensajes y sus lámparas, van a sacar a Chile de su extravío. Ellos son nuestros rescatistas.
Hasta ahora teníamos un Bicentenario de cartón piedra, de fachada. Ahora, en esta espera, nos preparamos para nacer de nuevo. Es una espera de un largo parto. Es la tierra que va a dar a luz a 33 hombres. Pero en realidad somos nosotros los que vamos a nacer, porque estábamos dormidos y muertos. No bastó un terremoto para despertar. Necesitábamos un Gran Mito para agruparnos alrededor de él: y ésta no es una "noticia" más, sino un Mito nacido del inconsciente del pueblo chileno. Como si la república quisiera nacer de nuevo, como si estos 33 mineros fueran sus hijos pródigos a punto de regresar. Y mientras no regresen, Chile no existe todavía.
Habrá entonces que dejar hablar de Bicentenario: habrá que hablar del nacimiento de una patria nueva, una patria en gestación que se está incubando al interior de nuestras propias entrañas y alma. Una patria que gestaremos entre todos en estos cuatro meses de rescate, de rescate de nuestra propia esencia perdida.
Una patria más pobre pero más rica, cuyos diamantes son los ojos de los más pobres. Una patria que quiere florecer (como desierto florido) con dolores de parto. Una patria de lámparas de minero y miradas limpias.
CRISTIAN WARNKEN

8 comentarios:

Cecilia dijo...

Un abrazo fuerte amiga.

Estoy conmovida por lo que acabo de leer, mi pensamiento y todo mi afecto con ustedes.
Sé que lo harán.

Vivi dijo...

un análisis social que nos toca para mirarnos como estamos..que afloren los valores que nos permita crecer!! gracias por compartirlo amiga!! abrazotee

Fiammeta dijo...

Hola querida amiga!!
No pasa un solo día sin informarme sobre la situación en que se encuentran los 33 mineros atrapados.
Me conmovió desde el primer momento que supe la noticia, pienso mucho en tí en vosotros, en Chile, en todos mis hermanos.
He leído en varias ocasiones artículos escritos por CRISTIAN WARNKEN y me maravilla, ya hace tiempo que pienso que el planeta entero está emitiendo su protesta sobre nosotros en general, tenemos que hacer un gran cambio, si te das cuenta están ocurriendo muchos desastres en el mundo entero y más que van a suceder hasta tocar fondo para que las personas hagan un gran cambio y afloren de nuevo cantidad de valores que se han perdido.
Un beso grande querida amiga, me acuerdo mucho de tí.

Vivi dijo...

gracias por todo Fia!! sé tb lo mucho que quieres a Chile!!será un despertar de conciencia para todos!! un gran abrazo y no te olvido amiga!!

beatriz dijo...

Hola Vivi,llegue a la Comunidad de la Espiga por recomendación de nuestra amiga Cecilia y me quede asombrada ya al entrar, la frase
de bienvenida esta genial..Luego como escribes el sentir del pueblo Chileno preocupado por los 33 mineros,lo importante.. y por el grito que está dando la tierra..
en mi blog escribí algo al respecto
y pense:molestará a"alguien"si escribo lo de las minas..lo tengo en borrador, pero leí declaraciones de su presidente Pineda:tán preocupado por los mineros como por el bicentenario, dijo:-es una buena noticia para celebrar justo ahora en septiembre
con los festejos.."Dios,pensé,que
poco vale la vida de unos hombres..
Finalmente me quedo con tu frase:
-quedarse ciego para volver a ver de nuevo-Gracias por el sentimiento que lo escribiste y pondre tu blog en la sidebar de mi blog xq te seguiré visitando.
un gusto conocer personas de sentimientos tan nobles.saludos

Vivi dijo...

Hola Beatriz!! un gusto compartir este escrito de Cristian Warnken!!Profesor de Literatura y comunicador Chileno!http://www.unabellezanueva.org/ te dejo el link!.. sus entrevistas son muy interesantes! gracias por todos tus comentarios!! bienvenida y también iré a tu rinconcito para conocerte!! un saludo grande!!

emilio dijo...

Solo puedo decirte que ójala... que el pueblo chileno despierte y crezca... es aún pequeño pero con la validez de su gente, lo hará... lo deseo.
Un abrazo.

Sefa dijo...

No me perdi en su momento el rescate de los mineros de tu tierra y me alegre y emocioné cuando iban saliendo de sus dias oscuros, que suerte tuvieron que hubiera maquinaria y personas que planificaran un rescate tan estectacular.
Me alegro por ellos y sus familias y espero que nunca lo tengan que repetir, un abrazo.Sefa